En un hospital una hermana religiosa había curado con infinita ternura a un paciente totalmente incrédulo.
Nunca le pudo hablar de Dios ni de Jesucristo.
Cuando le dieron de alta, este hombre le dijo a la hermana:
"Hermana, usted no me habló de Dios, pero hizo mucho más: me lo hizo ver"
Comentario:
Más que HABLAR DE DIOS, HAY QUE MOSTRARLO..Y se muestra a Dios en el testimonio de nuestra vida, pues no porque el ciego no vea la luz del sol no quiere decir que no brille, sino porque se debe al defecto de su visión igual que cuando tenemos cerrados los ojos de la mente y no somos capaces de ver a Dios que se deja ver por aquellos que son capaces de verlo con la limpieza de la mente y del corazón, alejando los pecados y las malas acciones...
Cuando por tus debilidades y pecados no puedes contemplar Su Rostro, recurre al Doctor que puede sanarte quitando el herrumbre del espejo de tu alma y de tu corazón para que puedas volver a contemplarlo..
QUE DIOS LES BENDIGA..!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario